Agosto 1/2: Saturno termina su período de retrogradación en conjunción eclíptica a la Galaxia Enana de Draco y en paralelo a la nube estelar M24, indicando posibilidades que se abren y recursos ocultos

Agosto 1/2: Saturno en estación directa en conjunción a la Galaxia Enana de Draco y en paralelo a la nube estelar M24

     Saturno termina su período retrógrado en el signo zodiacal de Escorpio estacionándose en conjunción eclíptica a una galaxia satélite de la Vía Láctea. Se trata de la Galaxia Enana de Draco, una pequeña galaxia ubicada en la constelación norteña de Draco, el Dragón. Esta galaxia tiene la peculiaridad de ser muy difícil de observar, ya que es uno de los objetos menos luminosos conocidos. Además, se especula la posibilidad de que contenga una gran cantidad de materia oscura. Estas características, en el plano astrológico, corresponden tanto con dificultades de expresión, como una gran habilidad para ocultarse, simbolizando situaciones desapercibidas, ocultas, escondidas, inconscientes.

     Por otro lado, la Enana de Draco es una galaxia con una alta metalicidad, es decir, sus estrellas han procesado en su interior muchos elementos más pesados que el Hidrógeno y el Helio, los principales constituyentes del universo. Esto suele representar astrológicamente una gran sofisticación, refinamiento, y un gran valor, en la misma medida que los metales preciosos como el oro son raros y valorados en la Tierra... De modo que lo que oculta la Enana de Draco no es precisamente algo malo o negativo. De hecho, está describiendo de riquezas ocultas.

     La estación de Saturno, sobre la Enana de Draco sugiere pues la necesidad de sacar a la luz nuestras riquezas escondidas, quizás en la forma de talentos ocultos en el fondo de nuestra psique. Saturno, en su estilo confrontativo, puede estarnos obligando a utilizar dichas riquezas, forzados por las circunstancias. El proceso se refiere a la posibilidad de echar mano de recursos que no habíamos tomado en cuenta pero que están disponibles si hacemos el esfuerzo de ponerlos a funcionar...

    Esto se deduce también del hecho de que Saturno se estaciona en paralelo a la nube estelar M24, que en sí no es un objeto, sino un enorme hoyo en la nube de polvo que rodea al centro de nuestra galaxia. M24 es en sí, una ventana que nos permite ver el interior de la Vía Láctea, un túnel luminoso que nos permite pasar a otro plano. Por lo tanto, representa puertas que se abren, posibilidades que surgen y que permiten ver más allá de las limitaciones presentes.

    Es pues un excelente momento para echar mano de recursos escondidos o menospreciados, pero para ello tenemos que estar dispuestos a utilizarlos. Ante cualquier dificultad, es preciso tener la suficiente flexibilidad mental para abrir nuestra conciencia y que las posibilidades y soluciones aparezcan. Permanecer con necedad encadenados a nuestras limitaciones presentes hará que desperdiciemos esta tendencia, que durará al menos dos semanas con gran intensidad...

    Se trata de una verdadera búsqueda del tesoro, pero en nuestro interior, lo cual hace la aventura mucho más interesante... ¡A excavar pues en nuestra psique!

Carlos Duarte
Astrólogo Investigador

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