Septiembre 1/2: Venus en contraparalelo a Neptuno y al cúmulo estelar M26.
Las conexiones entre Venus y Neptuno suelen traer una exaltación de las emociones y de las relaciones, pues ambos planetas simbolizan un principio de empatía y de amor, ya sea personal o universal. Su combinación puede implicar una buena dosis de afecto, inspiración, cooperación y comunión, o en el otro extremo, de idealización, confusión y decepción. Ya que un contraparalelo representa equilibrio, con ambos planetas a la misma distancia del Ecuador Celeste, los eventos relacionados con esta tendencia pueden ayudar a equilibrar nuestras relaciones, vida afectiva y creatividad.
Por su parte, el cúmulo estelar M26, situado en la constelación de Scutum (el Escudo), tiene muchas estrellas de tipo espectral B y A, mezcla que significa una gran necesidad de expresar ideas, de manifestar, de hablar. M26 también se caracteriza por tener una nube de polvo oscuro bloqueando la luz de su parte central. Esta nube tiene, incluso, una forma de cruz, acentuando la idea de obstáculos a vencer. M26 es un cúmulo que simboliza buenas ideas que deben expresarse, rompiendo resistencias y obstáculos, propios o de otras personas...
Neptuno ha estado haciendo un paralelo con M26 desde hace un par de semanas, dando un matiz de sensibilidad hacia las dificultades representadas por este cúmulo. En el plano internacional, esta mezcla coincide con la tragedia de los inmigrantes en varias partes del mundo, notablemente en la región de Medio Oriente, África del Norte y Europa, pero también en otras partes. Neptuno es el regente del mar, y M26 simboliza la gran necesidad de romper barreras, fronteras y dificultades, así sea a través de un sacrificio que ha terminado en la muerte de muchos... Aún siendo tragados por el mar, los emigrantes ilegales que han perdido sus vidas trascienden porque se liberan de la vida que los limitaba, significado de M26. Esto, obviamente, tiene un significado profundo para nuestra sociedad y cuestiona sus fundamentos. En las redes sociales, circulan las fotos de los náufragos ahogándose sin esperanza, exponiendo abiertamente la fragilidad y la crueldad de la humanidad.
¿Qué nos aporta la conciencia de esto como individuos, como sociedad? Justamente, aceptar que tenemos que romper barreras existentes entre los humanos para evitar que se rompan de maneras desgarradoras. Las fronteras económicas, ideológicas, políticas y religiosas mantienen a la sociedad humana en discordia, haciéndonos perder de vista que todos somos uno, y uno con el planeta en que vivimos. Si esto suena idealista, quizá corresponda con la naturaleza mental de las estrellas de tipo B de M26, que son de altísima temperatura, y cuyo idealismo es suficientemente fuerte como para impulsar al escape de una realidad distópica al costo de la propia vida. La naturaleza evasiva de Neptuno estimula fuertemente el idealismo oprimido de M26, prometiéndole un escape. Pero Neptuno también puede ser engañoso, y el océano que le está relacionado es un coloso ante la precariedad de los emigrantes, quienes están sujetos a los peores riesgos.
En el plano individual, es posible que también tengamos que romper barreras en el contexto personal, y nadie mejor que Venus (en contraparalelo a Neptuno y M26) para superarlas diplomáticamente. Venus, haciendo un efímero contraparalelo a Neptuno, equilibra con empatía y una actitud más terrenal las dificultades de entendimiento. Es un día especial para solucionar confusiones y aclarar malentendidos, evitando que los problemas entre la gente se ahonden. Obviamente, hay que tener una actitud diplomática para ello: la amabilidad hará maravillas. Ojalá esta amabilidad se manifieste en los gobiernos y organizaciones que deben atender las crisis humanitarias en el mundo... Como Venus rige ciertos aspectos económicos y las relaciones sociales, es posible que haya donaciones y haya un apoyo significativo a la solución de esta causa.
Por otro lado, Venus y Neptuno rigen el arte, así que es un excelente día para expresar toda la inspiración que pudo haber estado bloqueada desde hace semanas o quizá meses... Los artistas en particular pueden aprovechar esta tendencia que concreta la inspiración y las buenas ideas, pero todos podemos aprovecharla para darle un toque de armonía a situaciones difíciles, bloqueadas, confusas, decepcionantes...
El tránsito de Venus en contraparalelo a Neptuno y M26 no dura mucho, pero también puede servirnos para reflexionar nuestra posición ante las tragedias del mundo y lo que hacemos (o no hacemos) para contribuir a revertir este proceso. Y tiene que empezar a suceder en nosotros, los astros sólo reflejan nuestra realidad y nos indican su estado. ¡No perdamos la oportunidad de hacerla más amorosa cuando es más necesario!
Carlos Duarte
Astrólogo Investigador
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