Julio 9: El Sol, Neptuno y el cúmulo estelar M50 nos invitan a tomar conciencia del estado físico de nuestra realidad, a compensar el desfase entre la mente y el mundo material

Julio 9: El Sol está en conjunción eclíptica al cúmulo estelar M50 y a 135° de Neptuno. Esto refleja un momento en el cual las circunstancias nos invitan a reflexionar acerca de nuestra realidad material, el cuerpo físico, la seguridad y la estabilidad. Cualquier carencia o dificultad en este sentido saldrá a la luz, lo cual puede dar lugar a preocupaciones, pero lo importante es adquirir conciencia del estado real de las cosas para tomar cartas en el asunto. Muchos problemas podrán encontrar una vía de solución si se llega a la verdadera raíz de sus causas. ¿De dónde se deduce todo esto?

       El cúmulo estelar M50, que se encuentra en la constelación de Monoceros (el Unicornio) es un cúmulo abierto, es decir, relativamente joven de 78 millones de años, en cuyo centro hay una estrella gigante de tipo M, que resalta y domina visualmente al contrastar con el color azul de sus vecinas. Las estrellas de tipo M tienen una relación directa con el mundo material, el dinero, el cuerpo físico y nuestras necesidades básicas. M50 centra la atención sobre esta frecuencia, por decirlo así, y el Sol, al hacerle conjunción en su tránsito anual sobre este cúmulo, vitaliza temporalmente la conciencia de estos temas, dándole fuerza y energía a actividades relacionadas con la salud, el mantenimiento del cuerpo, del hogar, a las finanzas, a la administración y al cuidado y conservación de nuestros bienes, pocos o muchos.


       La relación del Sol con Neptuno a 135° nos mostrará áreas en las cuales hay cierta debilidad material o falta de conciencia sobre ésta. Neptuno todavía está ocupado en trascender la realidad material, justamente, después de su estación en oposición a la supernova de Vela hace unas semanas... Neptuno nos lleva muy lejos en el plano mental y espiritual, pudiendo llegar a visiones trascendentes, descubrimientos cientificos (como el reciente anuncio del Bolsón de Higgs, la "partícula de Dios") y realizaciones en el plano espiritual. Pero hoy y probablemente también mañana, el Sol y M50 nos invitan a darle un sustento físico, tangible, a nuestras visiones, a poner los pies en la tierra y a compensar carencias materiales que se hayan generado por descuido, distracción, negligencia o evasión. ¡No hay nada que temer! Tener un efoque práctico nos ayudará a equilibrar el desfase, grande o pequeño, que pueda haber entre la mente y la realidad material. Y de ahí, por supuesto, pueden salir decisiones importantes en nuestras vidas... Pero eso es otro tema del cual hablaremos mañana mismo...